El domingo 28 de julio de 2024 se celebrará la IV Jornada Mundial de los Abuelos y las Personas Mayores. El tema elegido por el Santo Padre – " No me deseches en el tiempo de la vejez" (Sal 71,9) – quiere llamar la atención sobre el hecho de que, lamentablemente, la soledad es la amarga en la vida de muchos ancianos, tantas veces víctimas de la cultura del descarte.
La primera Jornada Mundial de los Abuelos y de los Ancianos se celebró en 2021 y el Santo Padre decretó que se celebrara cada año el domingo más cercano a la fiesta de los santos Joaquín y Ana, abuelos de Jesús.
En este año de preparación para el Jubileo de 2025, que el Santo Padre quiere dedicar a la oración, el tema de la Jornada Mundial está tomado del Salmo 71, la súplica de un anciano que reflexiona sobre la historia de su amistad con Dios.
El Papa escribió un Mensaje para esta Jornada y el Cardenal Kevin Farrell, Prefecto del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, dice que, en su mensaje, "el Santo Padre subraya cómo, debido a la crisis de pertenencia comunitaria y al surgimiento de una mentalidad cada vez más individualista, la soledad de los ancianos a menudo no se percibe como un problema. Pero la Iglesia está llamada a construir algo diferente, a redescubrir el gusto por la fraternidad y a construir vínculos entre las generaciones". Además, el cardenal Farrel dijo que las familias y las parroquias "están llamadas a estar a la vanguardia en la promoción de una cultura del encuentro, para crear espacios para compartir, escuchar, ofrecer apoyo y afecto: así, el amor del Evangelio se hace concreto".
El Apostolado Mundial de Fátima se asocia a esta iniciativa e invita a sus líderes y miembros a organizar eventos especiales para el día, pero también, a incluir en sus planes pastorales, algunas iniciativas dirigidas a los ancianos y abuelos de la asociación, si es posible, siempre en presencia de Nuestra Señora de Fátima.
